De acuerdo con las descripciones de las crónicas antiguas, durante sus ceremonias en el solsticio de invierno de la familia alemana fue al bosque a un abeto preseleccionado, encendieron velas y decorado sus diferentes telas de colores. Después de la adopción del cristianismo por la costumbre de honrar comió en los territorios renanos adquirido gradualmente un sentido cristiano. Spruce se ha convertido en un árbol de Navidad, y se pone en la víspera de Navidad, por primera vez en las zonas urbanas, y luego en los hogares, como lo indica la fuentes de los siglos XVI y XVII escrito.
A mediados del XVIII ya decorado árboles de Navidad en cada casa alemana y son casi indistinguibles de moderno. A principios del siglo XIX, el árbol de Navidad comenzó su solemne procesión a través de Europa.
En Rusia, la costumbre de decorar patios coníferas o ramas ha tratado de inculcar a Pedro I, la introducción de una nueva era, pero después de su muerte, este detalle fue olvidado, guardar sólo como una marca de identificación sobre restaurantes, e incluso entonces todo el año. Fue sólo en el siglo 19, el árbol de Navidad, los escritores rusos descritos como una tradición exótico, aparece en las casas de los alemanes en San Petersburgo.
Una especie de modo "ráfaga" en el árbol de Navidad se originó en los años 40 del siglo 19: ya puestos en todas las casas de la nobleza de San Petersburgo. Hasta el final del árbol siglo ganado una presencia en casi todos los hogares de Rusia.
Los bolcheviques en 1918, la búsqueda de un vestigio del árbol de Navidad de la de los viejos tiempos y una parte de la religión, le prohibió a poner en sus hogares. Pero ... sin día de fiesta de los niños queridos no podía hacer incluso los partidarios de la nueva ideología. En 1935, el árbol de Navidad "rehabilitado": primero instalado en el Salón de las Columnas, y luego se dejó ponerlo en todas las casas de los pioneros en la Unión Soviética. No era Navidad y árbol de navidad ya en la parte superior de los cuales no está brillando estrella de Belén, una roja de cinco puntas. Pero sea como fuere, la belleza de los bosques para siempre en la vida de cada uno de nuestra familia un maravilloso cuento de hadas.